Hoy hablamos sobre el sistema linfático, lo importante que es para nuestra salud, bienestar general y equilibrio del pH. Descubre estos 3 consejos para limpiar tu sistema linfático.
El sistema linfático es una red compleja de órganos, ganglios linfáticos, conductos y vasos linfáticos que se distribuyen a lo largo de todo el cuerpo. Este sistema produce y transporta linfa, un fluido transparente que va desde los tejidos hasta el torrente sanguíneo.
Qué es el sistema linfático
Está formado por la linfa (fluido biológico), un líquido transparente que fluye a través de la circulación linfática y que se origina, principalmente, por el exceso de líquido que sale de los capilares sanguíneos yendo a parar al espacio intersticial o extracelular. Este espacio está formado por el líquido intersticial que rodea todas las células del cuerpo humano, no conteniendo ni hematíes ni moléculas de proteínas grandes.
Este fluido intersticial o matriz extracelular, también conocida como el sistema básico o tercer sistema según el Dr. Alfred Pischinger ha sido avalado recientemente por la comunidad científica y juega un papel crucial en nuestra salud y equilibrio del pH.
Según el Dr. Alfred Pischinger (padre de la histología 1899-1982):
La salud y la enfermedad se fraguan en este espacio, alrededor de todas las células del cuerpo. Su pH debe ser alcalino, un pre-requisito fundamental para la óptima salud celular y de todo el cuerpo en general.
Funciones del sistema linfático
Su función principal es mantener los líquidos corporales en equilibrio. Es decir, transportar líquido intersticial o intercelular de los tejidos de los vasos linfáticos hacia la circulación sanguínea.
Por otro lado, el sistema linfático tiene un importante papel en la inmunidad, ya que contiene linfocitos y macrófagos (glóbulos blancos), filtra y drena el exceso de líquidos y elimina toxinas.
Y, por último, el sistema linfático transporta sustancias como proteínas y lípidos a la sangre.
Es importante remarcar que carece de un sistema de bombeo propio como, por ejemplo, el del corazón con su sistema circulatorio sanguíneo.
Una de las funciones importantes de este sistema es la de eliminar toxinas y ácidos del organismo, ya que el fluido intersticial puede verse comprometido por muchas razones. Piensa en él como un complejo sistema de drenaje “alcantarillado”.
Síntomas que podrían indicar que tu sistema linfático está comprometido
- Problemas de piel.
- Artritis (inflamación articular).
- Migrañas.
- Cansancio crónico.
- Infecciones recurrentes en los senos paranasales.
- Problemas digestivos.
- Aumento de peso, retención de líquidos, hinchazón y celulitis.
Cómo cuidar el sistema linfático
Os mostramos algunos consejos para evitar que nuestro sistema linfático se vea comprometido.
Alimentación alcalina antiinflamatoria
Una dieta alcalina rica en verduras, frutas y hortalizas de temporada te ayudará a desinflamar y a eliminar líquidos retenidos. Lee el artículo Beneficios de la dieta alcalina.
Incluye alimentos diuréticos como: pepino, apio, alcachofas, espárragos, limón, repollo, tomates, berenjenas y sandía. Aquí te dejamos esta Receta de deliciosas alcachofas al vapor con vinagreta para depurar tu hígado.
Las hortalizas están repletas de vitaminas, enzimas y minerales alcalinizantes como el magnesio y el potasio. Además de contener clorofila que te ayudará también a depurar el sistema linfático. No te olvides de las infusiones diuréticas como la cola de caballo.
Incluye todos los días una gotas de clorofila líquida ya que posee un poderoso poder antiinflamatorio, favorece el drenaje de líquidos retenidos, además de oxigenar y depurar la sangre.
Los zumos naturales de verduras frescas son excelentes para drenar linfa, alcalinizar y desinflamar. Lee el artículo Beneficios de los zumos de verduras y frutas.
Y para aumentar tu consumo de potasio (este mineral alcalino es indispensable para eliminar líquidos), añade Alkaline 16 Greens, un súper alimento verde con innumerables beneficios para tu salud, cargado de vitaminas y minerales como el potasio.
Evita alimentos acidificantes que inflaman y favorecen la retención de líquidos como: embutidos, quesos muy curados, azúcar y snacks industriales ya que contienen saborizantes, colorantes y aromas artificiales, además de un alto contenido en sal y conservantes artificiales.
Hidrátate en profundidad
Este punto es crucial si queremos cuidar nuestro sistema linfático, eliminar toxinas, mejorar la circulación y eliminar el exceso de líquido retenido.
Bebe al menos entre 5 u 8 vasos de agua alcalina ya que contiene bicarbonatos y potasio, minerales esenciales para depurarte. Fabrica tu agua alcalina con Puriphy.
Al beber agua alcalina orinarás más y te ayudará a drenar el exceso de líquidos.
Haz ejercicio y trabaja en tu cuerpo
Practicar algún deporte con regularidad, te ayudará a movilizar la linfa. Incluye algún tratamiento de drenaje linfático para estimular la circulación y la linfa y favorecer la eliminación de grasa, toxinas y otros productos de deshecho.
Puedes probar con acupuntura, un tratamiento ancestral que forma parte de la MTC que ayuda a abrir las vías (meridianos) y estimular la eliminación de toxinas. Evita ropa apretada y practica ejercicios de respiración consciente ya que ayuda a bombear la linfa. El cuerpo tiene tres veces más líquido linfático que sangre y la respiración es muy importante para llevar las toxinas a la sangre y que desde ahí se puedan eliminar por el hígado y los riñones.
En resumen, un estilo de vida alcalino es tu mejor aliado para estar sano y cuidar de su sistema linfático.
