Aquí estoy de nuevo con un artículo imprescindible. Hoy quiero dedicar un espacio a hablar sobre el hígado, sus funciones y cuán importante es cuidar de este órgano tan noble que está situado en la parte superior derecha del abdomen. Descubre cómo depurar tu hígado.
Al hígado se le considera el gran laboratorio y filtro del cuerpo
Se podría decir que tiene tres funciones principales:
- La extracción de nutrientes como carbohidratos, lípidos y proteínas
- Almacenamiento de energía
- La eliminación de toxinas.
El hígado se encarga del metabolismo, almacenamiento y liberación de glucosa. Digestión de las grasas, producción de proteínas, eliminación de toxinas, producción de colesterol, almacén de vitaminas, minerales, y regulación de la coagulación sanguínea.
Este órgano regula la mayor parte de los niveles químicos de la sangre y excreta una sustancia llamada bilis que ayuda a descomponer las grasas para poderlas digerir y absorber.
Toda la sangre del cuerpo pasa por el hígado cada 3 minutos para ser purificada.
Pues bien, este órgano noble, aunque es capaz de limpiarse a sí mismo, es vulnerable a nuestros malos hábitos, estilo de vida e ingesta de sustancias toxicas como medicamentos y alcohol, dietas poco saludables ricas en grasas “trans”, carbohidratos y/o dietas altas en proteínas de origen animal.
Estas sustancias producen inflamación y obstrucción de los canales biliares.
Asimismo, vivir en entornos contaminados, tomar hortalizas y frutas con pesticidas, estar sometido a un estrés continuado y no descansar bien también afectan negativamente al hígado.
Según el Dr. Felipe Castro, cirujano hepatobiliar del Centro médico Imbanaco:
Estos malos hábitos van limitando su compleja función cada vez más y eso va alterando el funcionamiento del cuerpo dando origen a diferentes problemas o enfermedades
El hígado puede sufrir de patologías tales como:
- Hígado graso,
- Hepatitis A, B, C y D
- Carcinomas hepatobiliares
- Obstrucción de las vías biliares
Para del Dr. Castro es importante la prevención con una alimentación saludable, rica en verduras y frutas, evitando el sobrepeso y el sedentarismo.
Cuando el hígado se sobrecarga de toxinas no puede quemar bien las grasas y estas tienden a acumularse en el cuerpo y en los órganos internos generando problemas en todos los sistemas.
Pero además de las patologías antedichas y sin llegar a estar tan mal, hay otro elenco de síntomas que te podrían hacer sospechar que tu hígado está comprometido y que es necesario detoxificarlo.
Síntomas de un hígado intoxicado
- Sentir fatiga o estar más cansado de lo normal durante algún tiempo.
- Tener malas digestiones y/o estreñimiento/diarrea, hinchazón y dolor abdominal.
- Tener heces muy pálidas.
- Otro clásico es tener un sistema inmunitario debilitado y un pH ligeramente ácido. Es decir, padecer de acidosis latente de bajo grado.
- La persona puede sufrir de mal olor corporal, muy especialmente en la zona de las axilas a pesar de tener una buena higiene personal. Muchas veces se debe a un desequilibrio hormonal que a su vez está relacionado con la congestión hepática.
- Asimismo, se puede experimentar dificultad para perder peso.
- Estar irritable y de mal humor.
- Tener eccemas y acné.
¿Sabías que según la MTC (Medicina Tradicional China) el hígado juega un papel fundamental en lo que ellos denominan “drenaje y evacuación” de la sangre y en el equilibrio emocional?
Según la MTC el hígado alberga al alma, nuestra parte espiritual y que cuando la energía del hígado se estanca la persona puede sentirse desconectada de su parte espiritual y experimentar mucha ira, resentimiento y/o frustración.
De ahí la importancia de cuidar nuestro hígado!
Cómo cuidar y depurar tu hígado
Puede que te hayas sentido identificada con algunos de estos síntomas y te surja la pregunta: ¿Y ahora qué podemos hacer? Sigue leyendo y te lo explico con detalle.
Cuida tu alimentación
Este es un aspecto fundamental ya que lo que comes sí importa. El tipo de alimentos y la calidad de ellos favorecerán o bloquearán nuestra función hepática entre otras cosas.
Lo que debes evitar: alcohol, fritos, azúcar y alimentos ricos en azúcar como hidratos de carbono refinados (galletas, pasteles, helados, pan blanco, etc.) ya que favorecen el hígado graso y la congestión hepática. Y por supuesto, procura también evitar al máximo el consumo de lácteos.
Reduce o minimiza la ingesta de carne roja y embutidos.
Lo que sí debes tomar: verduras de hoja verde ricas en minerales como el magnesio y la clorofila, hortalizas de temporada y frutas como el pomelo, las uvas, el limón y los frutos del bosque ecológicos o en su defecto muy bien lavados. Legumbres y cereales integrales ecológicos.
Incluye semillas, nueces, brócoli y crucíferas ricas en azufre orgánico como el MSM, un mineral extraordinario para detoxificar el hígado.
No te olvides de las alcachofas, las endivias, la rúcula y el aceite de oliva extra virgen.
Mantén una buena hidratación
Como te he comentado al inicio, el hígado es el filtro de nuestro cuerpo. Este órgano vital elimina toxinas de nuestra sangre y la depura, ayudándonos, entre otras cosas, a combatir infecciones. Por eso, es sumamente importante mantenerse bien hidratado. Si no bebemos suficiente agua nuestra sangre se espesa, lo cual impide que el hígado pueda filtrarla con facilidad.
Nuestro cuerpo pierde a diario alrededor de 2´5 y 3 litros de agua, agua que debe reponerse para que pueda realizar correctamente sus funciones.
El hígado (73% agua) se encarga también de convertir la grasa corporal en energía y si no dispone de suficiente agua el cuerpo acumulará grasa extra.
Yo siempre recomiendo beber entre 5 y 8 vasos de agua alcalina ya que tiene una mayor capacidad de penetración y efecto depurativo y al hígado le va de maravilla.
Una manera sencilla de beber agua alcalina rica en antioxidantes es incorporar las gotas alcalinas Puriphy.
Depura tu hígado al menos una o dos veces al año
Es muy recomendable detoxificar el hígado un par de veces al año ya que es la mejor manera de mantener el hígado en buenas condiciones para evitar la inflamación y la acidosis de bajo grado precursoras de un sinfín de dolencias y malestar general.
Existen distintos métodos de los cuales se incluyen los dos anteriores, alimentación antiinflamatoria alcalina e hidratación correcta. Además, existen distintas formas de ayuno y una serie de complementos potentes naturales, muy eficaces y sin ninguna contraindicación, ideales para tomar con agua alcalina.
Hoy te voy a hablar del nuevo HepHatic Care un producto extraordinario de gran biodisponibilidad pensado precisamente para gente como tú que quieres cuidarse de una forma sencilla, sin complicaciones y de una manera muy eficaz.
Es una combinación natural alcalinizante, con acción multifase compuesto de vitaminas, hierbas y aminoácidos que se mezclan con agua, con zumo de limón o zumos verdes, tan sencillo como eso.
HepHatic Care optimiza las funciones del hígado ayudando a reducir ácidos y a fortalecer el sistema inmune.
Contiene minerales como el zinc, vitaminas del grupo B indispensables para el sistema nervioso como la B1 que ayuda a producir energía, es un poderoso antioxidante que mejora la función cerebral y mental. Vitamina B6, importantísimo para los nervios y desarrollo del cerebro. B9 (ácido fólico) que evita defectos de nacimiento en el bebé y es indispensable para la generación de sangre. Y vitamina B12 crucial para la salud de las neuronas y la sangre.
También tiene aminoácidos importantes como la L-Metionina, fundamental para la síntesis de proteínas conformado básicamente de azufre, un antioxidante natural potente que favorece el detox hepático, y el NAC (N-Acetil Cisteína) precursor del Glutatión en el hígado, un poderoso antioxidante que combate el estrés oxidativo.
Asimismo lleva hierbas hepáticas y raíces muy efectivas que ayudan a limpiar y a desinflamar el hígado como el Cardo mariano, la alcachofa, rábano negro, brócoli muy rico en MSM, extracto de ajo y limón.
Es una formula muy completa que a la vez también ayuda a mantener el diseño alcalino corporal.
En resumen, podemos decir que HepHatic Care te ayuda a tener más energía, a mejorar tus digestiones, a eliminar toxinas, metales pesados y ácidos, favoreciendo la regulación de peso y el sistema hormonal, contribuyendo a la calma mental y emocional. ¿Qué más se puede pedir?
Otros complementos interesantes
Otro de los grandes aliados para cuidar de tu hígado todo el año es la clorofila liquida, un poderoso antioxidante que oxigena la sangre, los tejidos y tiene la capacidad de depurar la sangre y el hígado. Además la clorofila es precursora del Glutatión en el hígado. En la web encontrarás mucha más información relevante sobre la clorofila.
MSM, el mineral de la belleza y la desinflamación. Este mineral compuesto de azufre orgánico es un gran depurativo hepático e intestinal. Está muy indicada en aquellos casos cuyo trastorno hepático se refleja en la piel provocando psoriasis o acné.
Tanto la clorofila como el MSM son compatibles con HepHatic Care.
Conclusión:
Como puedes ver, el hígado es un órgano noble que debemos cuidar con especial esmero ya que él depende nuestra salud física, emocional y como se dice en Medicina Tradicional China, nuestra salud espiritual.
Si te cuidas con regularidad con los sencillos pasos que aquí he compartido contigo, te sentirás con energía, disfrutarás de buenas digestiones, irás al baño con regularidad, tu piel lucirá sana y con brillo, pero por encima de todo, contribuirá a tu salud general, y a que te sientas de buen humor y alegre.
¿Se te ocurre algo mejor?
1 comentario. Dejar nuevo
Le escribo de Hermosillo, Sonora, México.
Cómo puedo adquirir estos productos para la desintoxicación del hígado para mi esposa y para mí.???
Élla tiene 73 y un servidor 71 años de edad.? Mucho agradezco de antemano su respuesta.