Hoy hablamos sobre la microbiota intestinal, su relación con la salud y cómo influye en la regulación del peso. En la actualidad, hay muchos estudios científicos que muestran un dato sorprendente: nuestra microbiota puede hacer que tengamos apetencias por ciertos alimentos para asegurar su propia supervivencia. Una microbiota en disbiosis te animará a comer alimentos acidificantes que mantengan esa situación de desequilibrio simbiótico. Por el contrario, una microbiota sana te animará a mantener ese equilibrio saludable. Descubre el papel de la microbiota en el equilibrio del peso.
El papel de la microbiota en el equilibrio del peso
Se suele creer que hay ciertos cuerpos que tienen tendencia a engordar “por constitución”. Y aunque es posible que sea cierto, en realidad sería más científico afirmar que se engorda por la constitución de la microbiota.
En los últimos años, diversos estudios han demostrado que la microbiota intestinal, desempeña un papel fundamental en la regulación del peso corporal y la obesidad. En el artículo de hoy hablaremos sobre la relación entre la microbiota y la obesidad. Además, aportaremos algunas claves para ayudarte a mantener tu microbiota saludable y mantener tu peso.
La microbiota es única en cada persona
La microbiota humana es un conjunto de bacterias “microorganismos” y genes que colonizan la piel, los intestinos, y las mucosas. Se obtienen a través del vientre materno. Tiene un impacto significativo en la salud y en la regulación del peso corporal. Desempeña un papel relevante en la digestión y absorción de nutrientes, así como en la regulación del sistema inmunológico, el sistema nervioso y el sistema endocrino. También es importante tener en cuenta el eje microbiota-intestino-cerebro.
De qué se ocupa la microbiota:
- Nos protege de la invasión de patógenos.
- Ayuda a digerir los alimentos.
- Produce vitaminas B y K.
- Estimula la inmunidad.
Nuestra microbiota está desequilibrada cuando:
- Sufrimos problemas digestivos.
- Hay dolor articular.
- Padecemos ansiedad en general y/o ansiedad por comer hidratos, dulces, lácteos.
- Aumentamos de peso o bajamos demasiado de peso.
- Desequilibrios hormonales.
Qué hacer para mantener una microbiota saludable
Alimentación alcalina
Consumir alimentos ricos en fibra ya que son prebióticos que dan de comer a nuestras bacterias buenas. Incluir frutas y hortalizas (verduras) de temporada. Tomar alimentos integrales, legumbres, patata enfriada por su contenido en almidón resistente. Fermentos como la kombucha o kéfir vegano que nos ayudarán a mantener nuestra flora bacteriana intestinal saludable. Podemos incluir Psyllium Husk, una fibra insoluble, puro alimento para nuestras bacterias benéficas que combate el estreñimiento y cuida del pH intestinal. Si padeces de estreñimiento cuentas con pHlush, un laxante natural osmolar con vitaminas, magnesio y L-glutamina un aminoácido que regenera la mucosa intestinal y ayuda a eliminar toxinas y exceso de moco de los intestinos. pHlush respeta la microflora intestinal y su pH.
Las bebidas de cola, los chicles y el alcohol alteran la microbiota intestinal.
Hidratación alcalina
Este punto es crucial ya que el colon y el intestino en general necesitan agua de calidad para funcionar bien. El agua alcalina ayuda a neutralizar los ácidos favoreciendo el equilibrio intestinal preservando la flora bacteriana saludable. Evita el agua de grifo que contiene cloro y los edulcorantes como el xilitol o el eritritol ya que perjudican y destruyen seriamente la microbiota intestinal. Bebe abundante agua alcalina al menos unos 8 vasos de agua alcalina por día.
Remineralízate
Se ha visto que tomar con regularidad sales minerales alcalinas que contengan las 4 macromoléculas esenciales como sodio, potasio, calcio y magnesio, ayudan a mantener no solo el pH adecuado del intestino/colon, sino la microbiota intestinal saludable y del todo el cuerpo. Incluye en tu día a día Phour Salts, minerales alcalinos que favorecen una microbiota intestinal saludable. Cuando tomes Phour Salts dejarás de anhelar esos alimentos acidificantes que hacen aumentar de peso, ya que además de tener un efecto saciante, ayudan a desarrollar las bacterias intestinales benéficas que se nutren de alimentos saludables.
Aprende a manejar el estrés
Evita las emociones negativas y el estrés continuado ya que activa el sistema simpático bloqueando es sistema digestivo y perjudicando seriamente la microbiota intestinal. Puedes practicar alguna forma de deporte, yoga, Tai Chi o simplemente meditar. Si lo pones en práctica a diario mejoraras mucho y verás que tus ansias por comer cosas que no te convienen y te hacen aumentar de peso y encontrarte mal disminuirán mucho.
En conclusión podemos decir que una microbiota saludable no sólo incide en nuestra salud general, sino que nos ayuda a estar en nuestro peso ya que nuestras bacterias nos pedirán solo alimentos saludables.
