Cómo el estrés puede dañar tu cerebro

En estos tiempos tan ajetreados y exigentes, muchas personas sufren ansiedad, depresión y estrés crónico. La ansiedad y el estrés están provocados por pensamientos y emociones negativas, temor, preocupación constante sostenida en el tiempo, desconfianza y tristeza. Esto puede producir cambios bioquímicos en el cerebro. En el artículo de hoy, os contamos cómo el estrés puede dañar tu cerebro.

Qué ocurre en nuestro cerebro cuando sufrimos ansiedad

Todos nos hemos bloqueado alguna vez y nos hemos sentido torpes a causa de la ansiedad. Son momentos en los que no se puede pensar con claridad. Es entonces cuando se activa el sistema simpático (contracción), el sistema inmune se debilita, nos acidificamos, se activan las catecolaminas como el cortisol, así como la norepinefrina y noradrenalina. Se activan las citoquinas inflamatorias y la histamina produciendo inflamación en todo el cuerpo.

Queda claro que sufrir estrés de forma continuada puede producir estragos y conducirnos a la enfermedad. Sin embargo, si aprendemos a darle la vuelta, podremos erradicar la ansiedad y el estrés para siempre.

Del mismo modo que las emociones negativas acidifican, activan las catecolaminas e inflaman el cerebro; las emociones positivas alcalinizan y activan el sistema parasimpático. Los sentimientos positivos producen endorfinas (hormonas de la felicidad), aumentan la serotonina en el intestino, dopamina (placer), oxitócina (unión), vasopresina, la GH, potencian el sistema inmune y desinflaman el cerebro.

Cómo gestionar el estrés

Compartimos varios tips muy efectivos para manejar el estrés, desinflamar el cerebro y potenciar los neurotransmisores y hormonas de la felicidad.

Lo que comes sí importa

Los alimentos no sólo influyen en el físico, también tienen un impacto en el estado de ánimo.

Seguir una dieta alcalina rica en verduras y frutas aporta vitaminas, minerales y antioxidantes. También contribuye a desinflamar el cerebro,  mejorar el estado de ánimo y aumentar la producción de serotonina en el intestino. Evitar sustancias y alimentos acidificantes que alteran la flora bacteriana intestinal y estresan el cerebro. Como por ejemplo: el azúcar, los alimentos procesados industrialmente, las bebidas carbonatas de cola y el alcohol.

¡Incluye un batido/zumo verde todos los días! Lee el artículo Prepara tu zumo verde alcalino perfecto. Consume alimentos ricos en triptófano como, por ejemplo: plátanos, legumbres, verduras de hoja verde, pescado azul y nueces. Bebe entre 5 y 8 vasos de agua alcalina diariamente, ya que tu cerebro necesita agua para funcionar óptimamente. Puedes preparar tu agua alcalina fácilmente con Puriphy.

Mantén tu colon limpio

Al intestino se le conoce como el 2º cerebro. El intestino está conectado al cerebro a través del nervio vago, está altamente enervado igual que el cerebro y comparten la misma microbiota. Para mantener una microbiota saludable incluye kéfir vegano ya que tiene prebióticos y posbióticos esenciales.

Un colon limpio y desinflamado es igual a un cerebro limpio y desinflamado.

Recuerda que el Detox es uno de los pilares fundamentales de la alcalinidad. Para ello cuentas con Phlush, un laxante natural osmolar que ayuda a limpiar el colon, eliminar el exceso de mucosidad a la vez que regenera toda la mucosa gástrica.

Maneja el estrés

Este aspecto es crucial. Las prácticas como el Yoga, el Tai Chi, así como la respiración consciente tienen un impacto definitivo en la bioquímica cerebral y en la salud mental. Con sólo 20 minutos al día se puede erradicar el estrés y la ansiedad.

Tampoco debe faltar el dormir entre 7 y 8 horas a diario, ya que así no sólo se regenerará el cuerpo, sino el cerebro también.

Tomar el sol y estar en la naturaleza también ayudan a aportar paz y a producir endorfinas.

Algunos complementos útiles

La Ashwagandha es un adaptógeno natural, tiene un efecto relajante, a la vez que vigorizante y ayuda a combatir el estrés de manera muy efectiva.

No deben faltar Phour Salts, unas sales minerales con magnesio y potasio que aportan energía y vitalidad, tan importantes en épocas de estrés. El estrés continuado nos desgasta y hace que nos sintamos agotados.

Y si aún requieres de un extra refuerzo prueba las perlas de lavanda, ya que relajan y ayudan a regular el insomnio, el nerviosismo, el estrés y la ansiedad.

Recuerda, un estilo de vida alcalino favorece la salud integral, desinflama el cuerpo y el cerebro y ayuda a mantener el dolor a raya.